¿Existe alguna relación entre Autoestima y Depresión?
La depresión puede hacer que las personas se perciban a sí mismas con una perspectiva mucho más negativa que la realidad. De la misma forma, cuando las personas viven con baja autoestima, estos sentimientos pueden llegar a afectar muchas áreas de su vida, desde las decisiones hasta sus relaciones. Por ello, en muchos casos, la autoestima y la depresión pueden relacionarse debido a que suelen alimentar el diálogo interno negativo, es decir, cómo te estás tratando a ti.
Entonces, ¿qué se puede hacer ante la depresión y la baja autoestima?
¿Cómo se relacionan la depresión y la baja autoestima?
Las investigaciones sugieren que las personas con baja autoestima, es decir, con una visión negativa de sí mismos/as, suelen tener más probabilidades de experimentar los síntomas de una depresión.
De hecho, la baja autoestima suele ser también un síntoma de la depresión muy común para muchas personas. La razón de ello es que, al tener depresión, la mayoría de las personas suelen dejar de hacer aquellas cosas que realmente aman, incluido cuidarse a sí mismos/as. Entonces, al dejar de lado el interior y el exterior, las personas acaban sufriendo problemas de autoestima. Además, cuando los síntomas de la depresión empeoran, la mayoría de las personas suelen experimentar también pensamientos más negativos sobre sí mismos/a.
Los estudios han analizado la prevalencia de la baja autoestima con trastornos como la depresión y otros problemas de salud mental. Según los resultados, tener una falta de autoestima aumenta el riesgo de sufrir de trastornos como la depresión. Por lo tanto, cuando trabajas en tu autoestima también estás reduciendo los síntomas propios de una depresión.
Causas de la baja autoestima y la depresión
Tanto la depresión como la baja autoestima suelen tener algunas causas comunes:
- Trastornos mentales: a veces tanto la depresión como la baja autoestima pueden estar causadas por otros trastornos mentales, como puede ser un exceso de estrés o debido a estar experimentando un trastorno de ansiedad.
- Traumas: a veces sentir una baja autoestima o padecer de un trastorno depresivo puede ser debido a un trauma de la infancia. Experimentar una situación traumática puede repercutir en el sentimiento de valor personal en la vida adulta, influyendo también en el desarrollo de una depresión.
- Estilo de crianza: el estilo educativo de los padres puede influir en los sentimientos de valor personal.
- Comportamientos aprendidos: Existen evidencias de que la baja autoestima puede ser un comportamiento aprendido, es decir, que la persona lo ha adquirido en los primeros años de su vida.
¿Cómo afrontar la depresión y la baja autoestima?
Si crees que sufres de depresión y de baja autoestima, es importante que acudas a un psicólogo/a profesional para recibir un tratamiento de inmediato. A continuación tienes algunos consejos:
- Escribe tus sentimientos y percepciones: apuntar lo que sientas y piensas día a día puede ayudarte a identificar diferentes patrones de pensamientos negativos. Además, las investigaciones también sugieren que la escritura, cuando se enfoca a los sentimientos y emociones percibidos, puede ayudarte a mejorar tu estado de ánimo y a proporcionarte un mayor bienestar psicológico.
- Habla con tu crítico interior: dejar de pensar en negativo puede ser muy complicado. De esta forma, una manera de lidiar con esta visión interna es precisamente respondiendo a lo que dice de nosotros o de las situaciones que vives. Por lo tanto, en vez de dejar pasar estos ataques, intenta razonar con ellos.
- Sé más amable contigo mismo/a: intenta tratarte como si fueras tu mejor amigo/a. Es decir, en lugar de menospreciarte al mínimo error, imagínate qué le dirías a alguien a quien quieres y trátate así.
- Establece metas realistas: evita a toda costa las metas demasiado elevadas. Nadie puede con todo, así que intenta dejarte un espacio para cuidarte a ti mismo a la vez de esforzarte por aquello que realmente quieres.
- Mantén un registro de lo positivo: no hace falta que hagas grandes cosas para sentirte bien contigo mismo/a. Algunas recomendaciones es que intentes visualizar todas las noches al menos tres cosas positivas que creas que hayas hecho durante el día.
- Evita las comparaciones: una de las maneras en las que suele atacar la autoestima es comparándote con los demás. Por ello, debes intentar no hacerlo, sino simplemente inspirarte para conseguir lo que realmente quieres.
La baja autoestima es un síntoma muy común de la depresión y viceversa. Sin embargo, tanto la baja autoestima como la depresión pueden ser tratadas. Aun así, debes saber que tanto la depresión como la baja autoestima si no se trabajan pueden provocar síntomas cada vez más intensos y abrumadores.
¿Cómo ayudar a alguien con depresión y baja autoestima?
Si crees que alguien de tu alrededor está sufriendo tanto de depresión como de una baja autoestima, te recomendamos que tengas en cuenta lo siguiente:
- Háblalo: en el momento que alguien te preocupe es importante comunicárselo. De esta manera podrás averiguar qué es aquello que les preocupa o que les hace daño y saber a través de sus palabras qué puedes hacer para ayudarles a afrontar estos problemas.
- Escúchalos sin juzgar: para que una persona con estos problemas de salud mental se abra a ti y te cuente aquello que le preocupa, es vital que intentes no juzgarlos o emitir juicios sobre aquello que tú crees. Es mucho más efectivo centrarte en las necesidades que cuenta la persona en esos instantes.
- Evita la confrontación: si existe un desacuerdo, es crucial que no los confrontes e intentes señalar tus opiniones de una manera más indirecta. La razón es que una confrontación puede alejar estas personas de ti.
- Pregunta qué puedes hacer para ayudarles: con esta acción les harás saber qué estás dispuesto a ayudarles en su lucha personal.
- Anímelos a buscar ayuda de un profesional: finalmente, es vital que estas personas acudan a un profesional de la salud mental que les ayude a afrontar los problemas relacionados con la baja autoestima y la depresión.
Las personas con depresión y baja autoestima pueden sentirse heridas y criticadas por sus seres queridos muy a menudo. Por ello, es crucial estar abiertos a sus sentimientos y pensamientos para poder ayudarles. Con esfuerzo y trabajo estos dos trastornos pueden ser tratados.